Agile, la metodología de moda

Por Bernardo Ramos, experto en seguridad de las TIC

Las modas en informática

La informática es un área de actividad que experimenta una fuerte tendencia a seguir el fenómeno de la moda.

La moda en informática presenta con frecuencia un movimiento pendular:

• Centralización / Descentralización
• Simplificación / Complexificación

En los años 80/90 IBM lanzó una gama de ordenadores basados en una arquitectura a la que denominaron "RISC" por "Reduced Instruction Set Computing". RISC vino a corregir la dificultad de mantenimiento y evolución de los sistemas tipo mainframe IBM 360, cuya complicada arquitectura cumplía el objetivo de aumentar la velocidad de proceso mediante un amplio juegos de instrucciones, la mayoría muy complejas, que realizaba más operaciones en un sólo ciclo de máquina.

RISC proponía simplificar los procesadores y hacerlos más fiables utilizando un juego de instrucciones más simple y rápido de ejecutar y realizando las operaciones más complejas en varios ciclos de máquina.

RISC supuso la entrada de IBM en el mundo UNIX y durante unos años coparon las ventas de ordenadores.

Y entonces IBM lanzó una nueva generación de procesadores basada en una arquitectura que llamó POWER (Performance Optimization With Enhanced Risc) que consistía en un procesador RISC con un juego de instrucciones más amplio.

Es decir, ampliamos el juego de instrucciones para que en un solo ciclo de máquina se puedan hacer más cosas,

Y ya tenemos el péndulo de nuevo en la posición de partida.

Cada moda en informática lleva asociadas unas siglas específicas o una palabra.

Muchas veces en inglés, que hay que pronunciar en ocasiones como si fuéramos nativos de un pueblo de la Texas profunda:

• Cliente – servidor
• Benchmark
• Multimedia
• “Imeil”
• ERP
• Wiki
• CRM
• Chat
• Social Media
• POC
• "Cláud"
• BPM
• Big Data
• “Bi uay o di”

La última moda, también aparece en forma de péndulo y con una palabra que hay que pronunciar en inglés: AGILE  (Pronunciar "Allíl").

Es un "movimiento" que propone sustituir la gestión clásica de proyectos por una aproximación iterativa en la que desde el primer momento se ve un resultado que se va perfeccionando progresivamente.

Llega acompañado de dos palabras más y una expresión:

• SCRUM:

Es la metodología más popular para aplicar la cultura "Agile" al desarrollo de proyectos informáticos.

"Un principio clave de SCRUM es el reconocimiento de que durante un proyecto los clientes pueden cambiar de idea sobre lo que quieren y necesitan y que los desafíos impredecibles no pueden ser fácilmente afrontados de forma predictiva y planificada. Por lo tanto SCRUM adopta una aproximación pragmática aceptando que el problema no puede ser completamente entendido o definido y centrándose en maximizar la capacidad del equipo de dar resultados rápidamente y responder a requisitos emergentes." (Del artículo sobre SCRUM en la Wikipedia).https://es.wikipedia.org/wiki/Scrum_(desarrollo_de_software).

• SPRINT:

Cada una de las iteraciones del método SCRUM, que suele durar 4 semanas o menos.

• User story:

La forma de expresar los requisitos del usuario.

AGILE: Huyamos del método "clásico" de desarrollo de aplicaciones.

¡No más Especificaciones funcionales detalladas!.

Regreso a la expresión de necesidades informal.

Vuelta a la improvisación y al método de experimentación, prueba – error.

Desarrollo por aproximación progresiva.

Aprovechemos todas las ventajas de algo que habíamos descartado por considerarlo poco profesional.

Suprimamos el efecto túnel de los proyectos informáticos.

En qué consiste el método "Agile"

Hay en Internet mucha literatura, y muy buena, sobre "Agile".

Basta con buscar en Google

No voy a cometer la osadía pretenciosa de explicarlo yo de nuevo;en primer lugar porque ya está hecho y muy bien en otros sitios, en segundo lugar porque no soy el mayor experto del mundo y no aportaría nada nuevo

Mi objetivo es reflexionar sobre esta ¿nueva? moda y dar algunos consejos a quien quiera acercarse a ella y experimentar.

¿Por qué es bueno el método Agile?

Porque elimina el efecto túnel de los métodos tradicionales de desarrollar proyectos informáticos.

Porque permite que el resultado final se acerque mucho más y refleje mejor las verdaderas necesidades de los usuarios.

Porque permite detectar y tratar inmediatamente y por tanto, con menos coste, las limitaciones de los sistemas utilizados para responder a las necesidades de los usuarios.

Porque permite aprovechar las características de los sistemas utilizados para responder a las necesidades del usuario y tomarlas en cuenta de forma anticipada, con un menor coste y mayor rapidez de adopción.

Porque facilita mucho la labor del usuario a la hora de definir sus necesidades utilizando un lenguaje y unos procesos más simples y comprensibles para él.

¿Para qué es bueno el método "Agile"?

Para proyectos pequeños o proyectos grandes fraccionables en fases pequeñas.

Para proyectos en los que el usuario final esté dispuesto (y disponible) a implicarse.

Para proyectos en los que el usuario final pueda expresar fácilmente sus necesidades.

Agile y BPM

La automatización de procesos mediante herramientas informáticas (BPM o Business Process Management) es un candidato ideal para la aplicación de la metodología "Agile".

Los proyectos BPM son proyectos cortos o fraccionables en fases cortas.

Cuando hablamos con un usuario del proyecto BPM, estamos hablando en el lenguaje de su propia actividad, le vamos a pedir que nos describa su trabajo,

En definitiva, le estamos pidiendo que nos cuente su propia historia (User Story).

Las herramientas BPM permiten entregar resultados muy rápidamente y se prestan a adaptaciones sobre la marcha mediante aproximaciones sucesivas.

Agile: el método natural

Es el que más se parece al comportamiento humano.

Cuando reflexionamos sobre algo, nuestra mente no hace un planteamiento estructurado del conjunto del objeto de nuestra reflexión, sino que lo abordamos poco a poco y por aproximaciones sucesivas.

La forma más fácil y natural para explicar un proceso es imaginarse una escena en la vida, explicar una historia con gente que hace cosas y a la que le pasan cosas.

¿Metodología o cultura?

Hay métodos formales que facilitan la aplicación del movimiento "Agile", pero éste, en sí mismo, más que una metodología es una actitud, una cultura diferente para afrontar los proyectos informáticos.

Y como tal, para su adopción no basta con adquirir una formación adecuada (aptitud), sino que se necesita cambiar los hábitos (actitud).

Los expertos en seguridad saben mucho de la diferencia entre aptitud y actitud, porque han experimentado la dificultad para progresar en materia de seguridad, que requiere cambiar los comportamientos.

Si queremos realmente aprovechar a fondo las ventajas de "Agile" debemos tener en cuenta y abordar un cambio en las actitudes de los actores implicados.

Pero también es una metodología, y para aprovecharla adecuadamente, necesitaremos la ayuda de un experto, sobre todo al principio.

Agile, la clave del éxito

1. Abordar los aspectos culturales para cambiar los hábitos de los actores implicados en el proyecto, haciendo que se sientan cómodos en una situación nueva en la que el punto de partida ya no es una definición clara y detallada de las necesidades del usuario que no variarán hasta la entrega final del resultado.
2. Disponer de la ayuda de un experto para aplicar el método de forma correcta, sin desviaciones.

El riesgo si no tomamos en cuenta los consejos anteriores es sumirse en una gran frustración:

1. Sin el cambio de hábito tenderemos a intentar unas especificaciones funcionales lo más detalladas y perfectos posibles, especialmente si el desarrollo se contrata al exterior, más aun si el departamento de compras está implicado en el proceso. Esto hará más largo el primer ciclo (o "sprint") llegando a convertirlo en el único y perdiendo el dinamismo del método.
2. Sin una ayuda adecuada, desvirtuaremos el método al intentar entregar un resultado lo más completo posible desde el principio, lo que retrasará el ciclo y perderemos de nuevo el dinamismo del método.

Agile está de moda, pero ¿es nuevo?

Como la mayoría de las modas, aunque siempre hay algo de novedad en ellas, esencialmente se trata de un invento de los años 80 del siglo pasado que ha emergido como tendencia en respuesta a la insatisfacción de los usuarios con los métodos tradicionales